20.3.13
Dónde quedó el Arco Iris…
¿Cuánta lluvia puede aguantar el paraguas del alma?
Llueve por la derecha y consigues cubrirte,
ahora arrecia por la izquierda y le das la espalda zafándote de su virulencia y descaro,
el aire te zarandea, te obliga a agarrarte a lo más cercano, aunque no siempre aconsejable,
lo que no te diste cuenta a lo largo de todas estas maniobras es que empezaste a tener los pies mojados, fríos, aislados del resto, llenos de salpicones…
Demasiado tarde, el escudo sólo cubrió una parte y no evitó la tristeza, la lágrima y el deseo de haber querido llegar a todo y finalmente no llegar a nada.
(…)
Recomponte!!! Tienes una vida que atender…
stoy enlazando este post a la fiesta de enlaces de Blanca de Personalización de Blogs
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Re-componte, sí, pero date un ratito de autoindulgencia...
ResponderEliminarGracias por ese ratito, Madre.
EliminarSe intenta, pero hay situaciones que escapan a nuestro control…
Supongo que mucha, después de todo al final siempre hay días de sol. Besos.
ResponderEliminarEso es lo que nos salva para no entrar directas en barrena…
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