Grupo de refugiados sirios caminando por las vías. Vía: La Vanguardia. |
por miedo, hambre y por espanto hacia lo más cercano.
Yo también subiría a un tren
y me lanzaría al camino
y chillaría si me arrancaran de los brazos a mi hijo.
Yo también me agarraría a una vía,
si quisieran arrebatarme una oportunidad de futuro.
Yo también caminaría sin mirar atrás y atravesaría parajes inhóspitos
si el frío, minuto a minuto, congelara mi vida.
Yo también cargaría lo justo
y confiaría en la bondad de la gente,
y en la empatía ante el terror infinito que produce una guerra.
Yo también cogería un tren hacia Dios sabe dónde
porque lo que dejo atrás es un cruel agujero negro.
Yo también cogería un tren…
y no por cogerlo soy una apestada con intención de arruinar la vida de otros.
Mi vida era como la tuya, y como tú, mi prioridad es y será siempre proteger a los míos.
Salí de casa bien vestida, con dinero y mucha incertidumbre,
pero los días, los kilómetros, el llanto y el miedo, pasan una larga factura.
Yo también cogería un tren
si la muerte me persiguiera…
• • •
Es difícil quedar al margen del horror, y pensar en cosas agradables y bonitas, cuando a otros les falta lo más básico y sus hijos quedan en el camino.
Hoy que regresa este blog a este mundo 2.0. solo quería compartir un recuerdo, una llamada, una angustia ante algo de lo que nunca nadie está libre.
Tampoco quería dejar pasar la oportunidad de recordar un libro ("Entre tonos de gris" Ruta Sepetys) que leí y que me ha hecho visualizar mejor este drama que estamos viviendo.
Bienvenidos, y una vez más gracias por estar ahí.
Virginia
Y yo también.
ResponderEliminarA veces sorprende la ligereza con la que la gente opina sobre las acciones de los demás sin ponerse en su lugar...
Ese libro lo tengo en la estantería y recomendadísimo. A ver cuándo lo leo por fin.
Un beso y buena semana.
Desde mi punto de vista, la ligereza es falta de empatía…
EliminarEn cuanto al libro, he de decirte que es de esos libros que te cortan la respiración, que tienes que cerrar mínimamente para digerir lo que estás leyendo. Te lo recomiendo una vez más.
Un abrazo